La danza pakeri munasma es una manifestación cultural ritual que se practica en el área geográfica del departamento de Ayacucho, provincia de Huanta, distrito de Sivia, específicamente en la comunidad nativa de Yaruri. Esta comunidad se encuentra ubicada en los márgenes de los ríos Ene y Apurímac, territorios habitados ancestralmente por la cultura Asháninca.

La fecha de ejecución de esta danza es el mes de agosto, el cual según el calendario inca y la cosmovisión andina es considerado el mes de ocio y de las calamidades. Específicamente, con el consentimiento del cacique de la comunidad, se elige el segundo domingo de agosto para realizar esta costumbre nativa del pakeri munasma.

Contexto cultural: el pueblo Asháninca

El Perú es un país pluricultural y multilingüe, y una muestra representativa de esta diversidad es la existencia de los Ashánincas, una cultura asentada en el valle del río Apurímac. Esta comunidad nativa cuenta con su propio dialecto y mantiene una forma exclusiva de vida en la que sobreviven rasgos ancestrales de machismo y poligamia.

En la estructura social tradicional asháninca, el género femenino es quien realiza las labores agrícolas y de transformación, siendo las responsables del sustento básico de la comunidad. Mientras tanto, el varón se dedica principalmente a tener una vida de ocio y de poligamia, un modelo de organización social que ha persistido desde tiempos ancestrales.

Reseña histórica de la danza pakeri munasma

La danza pakeri munasma surge como una expresión de reconocimiento hacia las mujeres de las comunidades de influencia asháninca. El mes de agosto es considerado el mes de las calamidades y de limpieza de males en la cosmovisión andino-amazónica. En este contexto, los pobladores varones dedican uno de los reconocimientos al real valor de la mujer, por su rol protagónico en el desarrollo de la sociedad nativa.

Esta celebración representa un momento especial donde se invierte la dinámica social cotidiana. Durante este ritual, los varones expresan su admiración y deseo hacia las mujeres a través de la danza, la música y diversos rituales de cortejo. Es una ocasión en la que se reconoce públicamente el trabajo incansable que realizan las mujeres ashánincas durante todo el año.

Desarrollo de la ceremonia pakeri munasma

El ritual del pakeri munasma comienza durante el día, cuando las mujeres salen a recoger leña como parte de sus actividades cotidianas. Ya entrada la noche, haciendo uso de antorchas, las mujeres ingresan al centro de la comunidad siendo esperadas por los varones, quienes previamente han preparado bebidas especiales.

Los varones preparan masato, ayahuasca o pushanga, todas ellas bebidas consideradas afrodisíacas en la cultura asháninca. Estas bebidas cumplen un papel fundamental en el desarrollo del ritual, ya que facilitan el ambiente de desinhibición y conexión espiritual necesario para la celebración del amor y la fertilidad.

El pakeri munasma es una danza que se desarrolla durante una noche entera, convirtiéndose en un ritual prolongado donde varones y mujeres se sumergen en el mundo del amor, pintados con los colores típicos de la selva y ataviados con vestimentas tradicionales que reflejan su identidad cultural.

¿Qué significa pakeri munasma?

Pakeri munasma está compuesto por dos vocablos del dialecto asháninca, lengua que se practica en los márgenes de los ríos Ene y Apurímac, territorios de asentamiento histórico de esta cultura amazónica.

  • Pakeri: Significa "te quiero".
  • Munasma: Significa "te deseo".

Por lo tanto, la denominación pakeri munasma quiere decir "te quiero y te deseo". Esta expresión lingüística revela la naturaleza profunda del ritual. En consecuencia, la danza pakeri munasma, por la naturaleza de su baile y por el significado de su nombre, es una danza de iniciación y de amor que representa el cortejo, el deseo y la formación de nuevas parejas en la comunidad asháninca.

Género de la danza pakeri munasma

La danza pakeri munasma pertenece al género ritual dentro de la clasificación del folklore peruano. Su carácter ritual está determinado por su función social y espiritual dentro de la comunidad asháninca. No se trata simplemente de una representación artística, sino de una ceremonia con significado ceremonial y propósito específico: el reconocimiento de las mujeres y la formación de nuevas uniones entre varones y mujeres de la comunidad.

Como danza ritual, el pakeri munasma cumple funciones sociales importantes: refuerza los lazos comunitarios, permite la expresión del deseo dentro de un marco culturalmente aceptado, reconoce públicamente el valor del trabajo femenino y facilita el encuentro entre potenciales parejas siguiendo las tradiciones ancestrales del pueblo asháninca.

Estructura coreográfica de la danza pakeri munasma

La danza pakeri munasma es una celebración cuya duración se extiende durante una noche completa, desarrollándose a través de diversas fases secuenciales que representan diferentes momentos del ritual de cortejo y amor. Cada fase tiene un nombre en dialecto asháninca y cumple una función específica dentro de la narrativa ceremonial.

Rupachiri: el ingreso con antorchas

El rupachiri marca el inicio ceremonial de la danza pakeri munasma. Esta fase consiste en el ingreso tanto de las mujeres como de los varones al centro de la comunidad, espacio que se convierte en el escenario principal del ritual. Para realizar esta entrada, todos los participantes hacen uso de antorchas que iluminan la oscuridad de la noche.

Las antorchas no solamente cumplen una función práctica de iluminación, sino que también poseen un significado simbólico. Representan el fuego de la pasión, la luz que guía el encuentro amoroso y el resplandor de la energía vital que caracteriza esta celebración. El rupachiri establece el ambiente místico y ceremonial que prevalecerá durante toda la noche.

Chinalis: la danza erótica de las mujeres

El chinalis es la fase que se caracteriza por el movimiento erótico de las mujeres, quienes bailan con finos y sensuales movimientos de caderas. Esta expresión corporal constituye una de las manifestaciones más importantes del ritual, donde las mujeres demuestran su feminidad, su poder de atracción y su energía vital.

Los movimientos del chinalis no son vulgares sino ceremoniales, representando la fertilidad, la sensualidad y la fuerza femenina dentro de la cosmovisión asháninca. A través de esta danza, las mujeres ejercen su poder de seducción y expresan su disponibilidad para el cortejo, mientras los varones observan admirados.

Monte pasachiri: el rapto simbólico

El monte pasachiri es un trote melódico que representa el rapto de los varones a las mujeres hacia los montes circundantes. Este momento constituye una representación dramatizada del cortejo tradicional, donde el varón "rapta" a la mujer de su elección para llevarla hacia la intimidad de la naturaleza.

Esta fase simboliza la transición del espacio público y comunal hacia el espacio privado e íntimo. El monte, como espacio natural y sagrado en la cosmovisión amazónica, se convierte en el escenario apropiado para la consumación del encuentro amoroso. El trote melódico acompaña este desplazamiento, manteniendo el ritmo ceremonial de la celebración.

Chustis: el despojo de las kushmas

El chustis es el momento ceremonial en el que tanto varones como mujeres se quitan las kushmas (túnicas) para quedar únicamente con los trajes elaborados de hojas (en el caso de las mujeres) y los wararis o taparrabos (en el caso de los varones). Este despojo de las vestimentas externas tiene un significado profundo de desnudamiento ritual.

Al quitarse las kushmas, los participantes revelan su verdadera esencia, simbolizando la autenticidad, la vulnerabilidad y la entrega en el encuentro amoroso. Los trajes de hojas y los taparrabos representan la conexión directa con la naturaleza y la expresión más pura de la identidad asháninca, sin artificio ni mediación.

Boreri: la caricia con la serpiente

El boreri es una fase ceremonial dirigida por el cacique de la comunidad. Durante este momento, el cacique acaricia a las mujeres que han demostrado mejores habilidades en el baile, utilizando para ello una serpiente. Este acto ceremonial posee múltiples significados dentro de la cosmovisión asháninca.

La serpiente es un animal sagrado en muchas culturas amazónicas, asociada con la sabiduría, la fertilidad y la transformación. La caricia del cacique con la serpiente representa una bendición, un reconocimiento público de la destreza de la bailarina y una invocación de fertilidad y buena fortuna. Es también una demostración del poder espiritual del cacique como autoridad máxima de la comunidad.

Piarinchi: el masato y la aceptación

El piarinchi constituye la fase final y decisiva del ritual pakeri munasma. Esta etapa consiste en el masticado de la yuca para elaborar el masato, una bebida fermentada tradicional de las culturas amazónicas. El varón ofrece el masato a la mujer de su elección, y la aceptación o rechazo de esta bebida determina el resultado del cortejo.

Si la mujer acepta el masato ofrecido por el varón, ella se convertirá en la nueva pareja de ese varón, formándose así una unión reconocida por la comunidad. Este acto de compartir el masato simboliza la disposición a compartir la vida, el sustento y el camino juntos. El rechazo del masato, por su parte, es una forma respetuosa de declinar la propuesta sin generar conflicto.

El piarinchi representa el momento culminante del ritual, donde las intenciones expresadas a través de la danza, los movimientos, los raptos simbólicos y las caricias finalmente se concretan en una decisión clara de formar o no una nueva pareja.

Vestimenta de la danza pakeri munasma

La vestimenta de la danza pakeri munasma está confeccionada con tejidos especiales cuyo teñido se realiza utilizando hojas llamadas sunkuru, planta que proporciona los colores característicos de las prendas tradicionales ashánincas. Esta técnica de teñido natural refleja el profundo conocimiento que poseen las comunidades amazónicas sobre las propiedades de las plantas de su entorno.

Tanto los varones como las mujeres utilizan dos tipos de trajes diferentes durante el desarrollo de la ceremonia, correspondiendo cada uno a distintas fases del ritual.

Vestimenta inicial: la kushma

Al inicio de la ceremonia, tanto varones como mujeres visten la kushma, una túnica de color marrón que constituye la vestimenta tradicional básica del pueblo asháninca. La kushma es una prenda sencilla pero significativa, que representa la identidad cultural y la cotidianidad de la vida en la comunidad.

Vestimenta ritual de las mujeres

Durante las fases más intensas del ritual, las mujeres utilizan un traje especial confeccionado íntegramente con hojas naturales. Este traje vegetal representa la conexión directa con la naturaleza amazónica, la fertilidad y la renovación cíclica de la vida.

Las mujeres se pintan la cara con achiote y otras plantas que proporcionan colores verde, rojo y blanco. Estos colores poseen significados específicos dentro de la cosmovisión asháninca: el rojo del achiote representa la vitalidad y la sangre de la vida, el verde simboliza la naturaleza y la fertilidad, y el blanco evoca la pureza y la espiritualidad.

Además, las mujeres portan antorchas durante el ingreso ceremonial y cargan algunas frutas en la cintura, elementos que complementan su atuendo y que poseen significados simbólicos relacionados con la abundancia, la fertilidad y la luz que guía el encuentro amoroso.

Vestimenta ritual de los varones

Los varones, después de quitarse las kushmas durante la fase del chustis, quedan vestidos únicamente con el warari o taparrabos, prenda tradicional masculina de las culturas amazónicas. Al igual que las mujeres, los varones se pintan con los colores típicos de la selva, utilizando pigmentos naturales extraídos de plantas del entorno.

Esta pintura corporal no es meramente decorativa, sino que cumple funciones rituales de protección espiritual, identificación cultural y expresión de la energía vital masculina. Los diseños y colores utilizados pueden variar según las preferencias personales y las tradiciones específicas de cada familia o linaje dentro de la comunidad.

Letras de la danza pakeri munasma

Las letras de la danza pakeri munasma están escritas en dialecto asháninca, con algunas palabras en español que mencionan lugares geográficos significativos para las comunidades amazónicas de Ayacucho. Estas canciones expresan sentimientos de amor, deseo y celebración comunitaria.

I
Kushma papitu ua ua
kuhma chinari ua ua
pakerymunasma (bis)
monte pañaschiri (bis)

II
Asha kametsa ashaninka
ivinqui pusanki chinari kametsa (bis)
kushma papitu masato pirey
pakeri munasma chinari kametsa (bis)

III
Silvia, llochegua, san francisco
todo el vrae en mi corazon (bis)
same maroni piarinchi
china munari munasma (bis)

Estas letras mencionan elementos clave del ritual como la kushma, el masato y el piarinchi, así como referencias geográficas a Sivia, Llochegua, San Francisco y el VRAEM (Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro), territorios tradicionales de las comunidades ashánincas.

El VRAEM y las comunidades ashánincas

El Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro, conocido por sus siglas como VRAEM, es el territorio donde se desarrolla la cultura asháninca y donde se practica la danza pakeri munasma. Esta región geográfica, ubicada entre los departamentos de Ayacucho, Cusco, Junín, Huancavelica y Apurímac, constituye uno de los espacios de mayor biodiversidad del Perú.

Las comunidades ashánincas del VRAEM, como Yaruri en el distrito de Sivia, han mantenido sus tradiciones culturales a pesar de las dificultades históricas que ha enfrentado la región. La danza pakeri munasma representa una de estas tradiciones vivas que continúan practicándose en las comunidades, expresando la identidad cultural y la cosmovisión amazónica de este pueblo originario.

Significado cultural y social del pakeri munasma

La danza pakeri munasma trasciende su dimensión puramente estética o festiva para constituirse en un mecanismo fundamental de reproducción social y cultural de las comunidades ashánincas. A través de este ritual, se transmiten valores, se establecen vínculos sociales y se perpetúan tradiciones ancestrales.

El pakeri munasma cumple varias funciones sociales simultáneas. En primer lugar, representa un reconocimiento público del trabajo y valor de las mujeres, invirtiendo temporalmente la dinámica social cotidiana donde el varón mantiene una posición privilegiada. Durante esta celebración, las mujeres son el centro de atención, admiración y deseo.

En segundo lugar, el ritual funciona como un mecanismo socialmente aceptado para la formación de nuevas parejas. En una sociedad donde existe la poligamia, el pakeri munasma ofrece un espacio ceremonial donde los varones pueden expresar su deseo de incorporar nuevas parejas y donde las mujeres pueden aceptar o rechazar estas propuestas dentro de un marco ritual respetado por toda la comunidad.

En tercer lugar, la danza refuerza la identidad cultural asháninca mediante el uso del dialecto, las vestimentas tradicionales, los instrumentos musicales propios y los rituales específicos de esta cultura. Es una forma de resistencia cultural y de afirmación de la identidad frente a las presiones de la modernidad y la globalización.

Música de la danza pakeri munasma

La música de la danza pakeri munasma es conocida con el nombre de tushush y se caracteriza por incluir cantos en dialecto asháninca. Esta música posee características distintivas que reflejan la identidad cultural de las comunidades amazónicas de Ayacucho.

La música del pakeri munasma recibe la influencia de los nativos de la selva de Chanchamayo, región que comparte características culturales con las comunidades ashánincas del río Apurímac. Esta influencia se manifiesta en el carácter alegre y dinámico de la música, que motiva a los participantes a un baile lleno de energía y vitalidad.

Los ritmos del tushush combinan elementos percusivos con melodías que evocan el entorno natural de la selva amazónica. Los cantos en dialecto asháninca expresan sentimientos de amor, deseo y admiración, acompañando cada una de las fases del ritual y creando el ambiente sonoro apropiado para el desarrollo de la ceremonia.

Danza Pakeri munasma - Perú

Danza Pakeri munasma - Perú

Maravillosa danza interpretada desde la selva de Ayacucho